Con esto de la puta crisis y de como va esta España nuestra uno tiene pocas cosas en las que pensar, y mucho menos en las que escribir.
Y para colmo, ahora estoy de luto.
Mi disco duro portatil de 2,5 pulgadas que me ha acompañado durante los últimos dos años, ha sido fiel a la amenaza que casi todos los aparatos electrónicos nos hacen siempre de dejar de funcionar justo antes de la pérdida de garantía, o justo despues de perder el ticket, y ha expirado. Así, sin más, sin previo aviso, llevándose consigo gigas de información. Fotos, archivos personales, textos, escritos, música, pelis, buen wrestling....
Es como volver a empezar, es como volver a estudiarlo todo. Sensación de desasosiego y miedo al pensar "¿Que pasará cuando busque este programa, o esta foto?"
¿Que pasará cuando quiera escuchar esa melodía que me acompañaba cuando lo necesitaba, y que con sólo meter la mano en el bolso y enchufarla a algún dispositivo compatible podía oir?
Su sustituto no tardó ni una hora en llegar. Mismo peso, mismo color... Pero vacio.... Terrible vacio de los más de 300 Gb que se perdieron, y que por mucho que lo intente, no podré volver a recuperar.
El chorizo más largo del mundo
Hace 14 años
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